Ahora en el túnel podía experimentar la sensación de la muerte asfixiado por miles de microbios en el cerebro. Ese monstruo en el cielo se maravillaba por la simpleza de los humanos; si pensar en las lagunas contaminadas de la Magdalena en medio de la violencia en Yondó Allí cerca el rey supremo del petroleo. Solo pude tomar en las manos el oro negro de Barranca,La tierra amarillenta cubría el aeropuerto donde los militares conversaban la ultima huida al puteadero de Kamantra.

La pintura de house séptimo piso. Donde los obreros experimentaban la sobriedad del paisaje, las risas de los foremans, y la tristeza de los fumadores de habanos con sus largas colas y chiveras de los años 70. Las mujeres que traídas de los continentes expandían sus deseos al dolar de los puteaderos de la kuka los culos de la guaira; besos ardiente la esquina de cinco chavo, si esa historia fascinante de los creyente de la biblia de las mañanas y los nomejodas de los ateos que se cagaban con las plegarias de unos pericazo de utopías. Los burdeles de la media estrellas, de los poetas extraordinarios de poco talento que vagaban por los parques de la vieja ciudad, así iba al vaivén dándose cabezazos en el centro comercial.

Plotinus

Allí la existencia 
en la curva de los Panteístas
rodeada de una mar 
de múltiples continentes.

Alguien observa 
que aún las carreteras
infligen soledad
todo lo simple de la vida
en el oleaje
intrínseco del crepúsculo.
Vamos dejando a tales seres
que también tienen historia
una rutina
un spleen.
Los vagabundos
enredos que imposibilitan
una oración.