La yerba alienable
en la tristeza de la piel.
Hablamos de la oración,
atravesar el dolor,
en la meditación de un Dios.
Hemos cumplido
con el inventario
minucioso del adicto.
En el pretil,
la putaná obsesión.
Compulsivos los instintos
amarran mi existencia.
Trato de hallar,
la alegría de vivir.
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